
Ha pasado el tiempo
mucho tiempo.
Mis ojos se han gastado
(es razonable)
y sin embargo tengo
una visión más clara de las cosas
que forman el paisaje donde vivo.
Mis oídos, también
algo han perdido
del caudal que aceptaban en su cauce.
Y sin embargo hoy
siento que escucho
de manera más clara,
sin importarme origen, voz o absurdo.
La vida quita
y da compensaciones.