
Todos andan de prisa.
Gesto adusto,
la mirada en un punto
que no sé si conocen.
Autómatas.
Jinetes de una cinta,
hasta el andén
que marca su destino.
Indiferencia o reacción,
dos actitudes,
cercanas
aunque suenen tan dispares.
Pretendo otro color.
Por eso debe ser
que busco refugiarme
detrás de algún gorrión
o en los ojos -aún libres- de los niños.