sábado, 13 de marzo de 2010

Nosotros


Es tiempo inexorable
de instalar en los labios
y anidar en el alma
la palabra nosotros.


Porque nosotros somos,
albañiles de cada
alegría o fracaso
que pueble al Universo.
En alguna medida,
aunque no nos parezca,
todos somos arena
de idéntico desierto
o gotas de una lluvia
o silbo de algún viento.

Si así no lo entendemos,
si no nos estremece
como propio lo ajeno,
hemos de ser testigos
de ver que se suicidan,
las tenues esperanzas
de volver a los tiempos
donde el sol era abrigo,
los ríos agua fresca
y el paisaje un regalo
que la vida nos daba.